FOMENTANDO LA PARTICPACIÓN

    El post de hoy trata sobre fomentar la participación en clase de los alumnos y, a su vez, mejorar la motivación tanto del alumnado como del profesorado. La motivación por parte de los profesores es fundamental para conseguir unas clases dinámicas, en la que los alumnos aprendan casi sin darse cuenta de que están aprendiendo. 

    Como ya sabemos hay diversos perfiles de estudiantes en cada aula, extrovertidos, introvertidos, con alta o baja autoestima, altos, bajos... y una lista infinita de características tanto personales como sociales. Por esta razón, nosotros como docentes, tenemos que tener en cuenta todas estas características e intentar que todos los alumnos sientan la seguridad y comodidad de participar en nuestra clase sin sentir el miedo de equivocarse y sentirse con menos capacidades. 

    Por lo tanto, voy a comentar una serie de estrategias que pueden servir para potenciar la participación de todos los alumos del aula: 

• Motivación del docente. Un docente motivado, con pasión y ganas de trabajar y educar es muy necesario para transmitir esa misma motivación a sus alumnos, que es imprescindible para que ellos generen la confianza suficiente durante la asignatura,  superando así sus pensamientos negativos y participar sin miedo a la equivocación. 
• Plantear problemas para resolver o juegos. La resolución de problemas durante las horas de clase, principalmente cuando esta activida es dirigida a trabajar en grupos, permite a los alumnos relacionarse con sus compañeros de clase (es recomendable formar estos grupos de forma 'aleatoria', intentando no juntar a los amigos, de forma que se conozcan todos mejor entre ellos). Además, les permite aprender de una forma más divertida, fomentando de esta forma la participación y desenvolvimiento social de los alumnos. De esta forma se potencia también el trabajo colaborativo. 
• Preguntar por ejemplos y demostraciones a los alumnos. Al preguntar por ejemplos o demostraciones estamos permitiendo que nuestros alumnos participen en clase a la vez que se fomenta su creatividad y obligamos a que estructuren y organicen sus conocimientos adquiridos. 
• Activación de conocimientos previos. 
• Distribución de roles en los grupos de trabajo. Mediantre esta distribución, se consigue la participación total de todos los alumnos. 
• Aportación formas de acceso a la información. 
• Aportación de experiencia personales en las aulas. Preguntar a los alumnos por experiencias personales relacionada con la materia impartida en cada clase, permitiendo la participación de los alumnos. 
• Realización de actividades prácticas. Estas actividades fomentan la participación activa de los alumnos, evitando que todas sus aportaciones sean pasivas. Un claro ejemplo podría ser la búsqueda de fotografías de animales en peligro de exinción y luego compartirlas en clase. 
• Participación en autoevaluciones y valoraciones de los compañeros. La elaboración de lúbricas para la evaluación objetiva de sus compañeros y suya propia. 

    Para poner en práctica lo anteriomente mencionado, se me ocurre proponer una actividad relacionada con Biología, que es mi especialidad. Se me ha ocurrido que como consecuencia de los efectos tan graves e irreversibles que está suponiendo el cambio climático, podemos hacer una pequeña aportación, optimizando el uso de los recursos del centro y el reciclaje de los resíduos.  

    Los alumnos tienen que mejorar el consumo de electricidad, agua, calefacción... Para ello se pueden poner etiquetas que recuerden apagar las luces cuando se abandone el aula, cerrar los grifos de agua en los baños cuando no se estén utilizando, ventilar de forma eficiente las aulas...

    Una medida más puede ser depositar los resíduos en sus debidos contenedores de reciclaje. Para ello se pueden aumentar el número de papeleras en los patios y aulas, utilizar el compostero y añadir etiquetas que recuerden qué resíduo corresponde a cada contenedor. También se pueden usar espacios para la plantación con fines purificadores en el interior o ampliación de un huerto en el exterior, fomentando así la biodiversidad. Otra medida podría ser la concienciación de la utilización de plásticos de un solo uso; por ejemplo, emboltorios de almuerzos o bocadillos, carpetas para apuntes, fundas, forros de libros... De esta forma, recordamos a todos los alumnos la regla de las tres R: Reducir, Reutilizar y Reciclar. 

    Todo este proyecto requiere de una organización y estructura por parte de los alumnos del centro para poderlo llevar a cabo, fomentando de esta forma la participación de todos. Debe haber una temporalización que permita ir desarrollando progresivamente y una evaluación final de los resultados y de la participación del alumnado en todo este proyecto. 

Además, se incorporarán todas las ideas factibles que aporten los alumnos para este proyecto y se intentará también implicar a toda la comunidad educativa, promoviendo que los alumnos lleven estas medidas a sus hogares.